1/12/10

la contracara a la posibilidad que brindan las redes sociales de difundir información y proyectos de una manera increíble, no es la banalidad ni el tiempo y espacio invertido en mostrar una vida privada sin ton ni son. El revés perfecto es un lenguaje que trampea, que miente poco comprobablemente, que no crea la imagen evocada en el plano de lo real. Proyectos y políticas que no existen fuera del lenguaje de la virtualidad - aún publicitado así como verdaderos-, cuyo acontecer es perfecto en ese éter bombista, pero que en la práctica de la vida real no existen. Quizá porque a veces el proyecto es más importante en lo discursivo que en lo real.
Digo que si de pronto x político cierra su cuenta de facebook y eso resulta como inmolarse políticamente o x proyecto sociocultural da de baja su blog y la iniciativa pierde toda se esencia; la única naturaleza del político era prometer y construir castillos en el cable y del proyecto vender papelitos de colores

1 comentario:

Caro Pellejero dijo...

ey! qué lindo, hacía tanto que no entraba al blog, que me había perdido unas cuantas

yo pienso que en esta virtualidad, es tan posible la construcción de casi cualquier escenario o escenografía, como incluso la invisibilización de cosas bien concretas. El chicle de frutilla que creemos verdadero, que asumimos con convencimiento como sabor real. Más allá del gesto, del político x, o del proyecto x, creo que todas esas construcciones van a definirse -y defenderse- verdaderamente en el tiempo, en el largo plazo, donde seguro veremos qué queda de todo, concreta y simbólicamente. Esto que vos decís está buenísimo; creo que sirve para interpelarnos, todos los que hacemos proyectos. Bah, que más que proyectos pienso hacemos acciones, en medio de un hilo más o menos común, que a veces se corta, se vuelve a atar como de a cachos, en trazos gruesos, desprolijos. Después alguna cosa se hila un poco mejor, se vuelve a enhebrar; pero en definitiva, siempre nos quedará la duda interior de si sirvió para algo. Pienso que ahí lo que nos queda es el tiempo, ver como aguanta la casuchita que hicimos con bastante impericia, el viento, la lluvia y los años.
Proyectos x, políticos x, declamaciones x pueden surgir de distintas necesidades de coyuntura, pero en el tranco largo se verá cuando el blog cierre, las cuentas de facebook decaigan en fans y las elecciones se pierdan.

beso amiga, y vení pronto así nos vemos!