18/6/07



Hoy me despertó tempranito mi amigo Taruli, para que vayamos a ver más hierbas además de la carqueja con las que yo podría hacer té. Taru aprendió mucho de Martín de Prada, quién vivió muchos años en lo que era un puesto de vialidad a la vera de la ruta 3 llegando a Burato. El viejo hacía infusiones con muchas de las hierbas que rodeaban lo que ahora es una ruina. la defensiva Zarzamora, Malvarrubia, Ruda. El lugar sin duda ha sido increible. Taru me marca adonde se encontraba lo que ya no está: acá había unas parras gigantes, acá una salamandra, acá no sentábamos al fresquito. Hay entre los eucaliptus unas pinitos pequeñísimos que él mismo plantó hace años y unas tunas retorcidas y consistentes en agua que Don Martín sembró para que las perdices coloradas comieran el fruto. Hay una plataforma de cemento en donde antes habia un estanque y un molino,"así hicieron esto, me dice, con tanto sacrificio".
Ahí juntamos zarzamora, que es como una rosa mosqueta.
Luego nos fuimos al canal de la feria, en busca de menta, que ahora no crece porque el canal estÁ bastante seco, pero cuando corre agua se deja ver, así, en la orrillita, como sopándose. La menta crece por donde vivía Garagiola el Prolijo, el que echó a la mujer porque había una manchita en el mantel y eso le resultó intolerable, dicen.
Por último fuimos en busqueda de la carqueja, que crece cerquita de los durmientes de la vía, ahí donde esas líneas atraviesan la pampa y se escucha el viento, el vuelo suave de los ·viuditas blancas· y el fricar de la ropa al caminar, los pies y los abrojos. Acá, me dice, y me cuenta la historia de un trabajador de la feria que adelante de todos mató al malevo Farías, quién coqueteaba con su hermana.
Hay escencias para nuevas infusiones, hay cachetes colorados del frío y hay historia para rato. Hago mapa.